Ramiro González afirma que su gobierno ha dado respuesta a los problemas de la covid-19 y se ha dedicado a “planificar la Álava de futuro y avanzar hacia ella”

El diputado general de Álava, Ramiro González, ha puesto en valor la labor realizada en los dos últimos años por el Gobierno Foral que preside, que ha dado respuesta “inmediata” y “urgente” a los efectos de la crisis sin precedentes provocada por el coronavirus, y de forma paralela, ha planificado y puesto en marcha políticas para dar respuesta a los retos del territorio y que suponen “la mayor garantía para el futuro de Álava”.
El diputado general de Álava ha realizado esta mañana un balance de ecuador de la legislatura 2019-2023 tras el Consejo de Gobierno Foral y coincidiendo con que este jueves, 8 de julio, se cumplen dos años desde la toma de posesión del Ejecutivo foral de EAJ-PNV y PSE-EE.
Durante su intervención, ha asegurado que los pilares fundamentales de la actuación del Gobierno Foral han sido el liderazgo, la colaboración y la estabilidad, tal y como adelantó en su discurso de investidura. “Liderazgo a lo largo de estos dos años a la hora de definir tanto la respuesta inmediata a las consecuencias de la crisis de la covid-19 como las líneas maestras del futuro de nuestro territorio. Colaboración con el resto de instituciones y con el conjunto de la sociedad, para sumar entre todos y abordar proyectos que solos no podemos afrontar. Y estabilidad política, que se fundamenta no solo en la mayoría absoluta, sino en la voluntad política de huir de la confrontación, de centrarse en lo importante”. Ha defendido que Álava “ha ganado en atractivo” durante los últimos años, con la suma de proyectos y empresas que han querido instalarse en el territorio. “La covid-19 no nos ha parado. Nos hemos ocupado de lo urgente y de lo importante. De resolver los problemas inmediatos y de planificar la Álava de futuro y avanzar hacia ella”.
Ramiro González ha situado los tres ejes de la acción del Gobierno Foral en “seguir avanzando en la recuperación económica hasta el pleno empleo, mantener la hora de ruta ya marcada en políticas sociales, y continuar abordando el cambio climático y la transición energética”.
Hoja de ruta en políticas sociales
El diputado general ha hecho hincapié en las políticas sociales y, en concreto en la política de cuidados. “Las políticas sociales en Álava tienen un rumbo claro, que se han definido y han dado pasos firmes durante estos dos años de legislatura”. Ha citado, en concreto, las dos principales líneas de actuación en este ámbito. Uno de ellos es el programa Etxean Bai dirigido a ayudar a las personas mayores que quieren permanecer en sus domicilios y apoyar la creación de empleo en el sector de los cuidados.
La otra es el modelo de cuidados Gizarea destinado al ámbito residencial y que está centrado en las relaciones entre residentes, familiares y allegado, y el personal de los centros. Son las “columnas vertebrales” del futuro de las políticas sociales del territorio, junto a la apuesta por el modelo público-social que supone la futura residencia Arabarren, que ya está en la fase de construcción. A ello hay que su sumar el programa Araba a Punto, la estrategia para combatir la soledad no deseada; el impulso del envejecimiento activo y la solidaridad intergeneracional, y los pasos dados para la puesta en marcha de nuevas plazas para personas con discapacidad, ente otras iniciativas.
Avanzar en la recuperación económica
Respecto al primero de los ejes, la recuperación económica, ha insistido en que “la capacidad de recuperación de Álava ha quedado demostrada”, como se ha comprobado con los datos de personas desempleadas. “Durante el último año el desempleo ha descendido en Álava un 16,68%, frente al 6,43% de la media española. El objetivo es volver a un desempleo por debajo del 10% y seguir avanzando hacia el pleno empleo”.
También la recaudación se está recuperando, como demuestran los datos correspondientes al mes de mayo. “Un incremento de un 40,6% respecto al mismo periodo del año 2020, lo que es un indicativo claro de recuperación”, ha explicado.
El diputado general ha detallado algunas actuaciones de la Diputación Foral en esta materia, como la apuesta por una nueva economía basada en la digitalización, y el refuerzo del posicionamiento de Álava como territorio atractivo a las inversiones. Desde 2019, se ha facilitado la implantación o ampliación de 11 proyectos empresariales. También el apoyo a la creación de un Centro de Fabricación Avanzada de Automoción, y la colaboración con la UPV-EHU y Tecnalia para crear un Centro de Terapias Farmacéuticas Avanzadas.Asimismo, ha puesto en valor el esfuerzo de la Diputación Foral por fomentar la contratación, apoyar al comercio y al turismo, incluida la hostelería y las agencias de viaje, por primera vez. Una muestra evidente de este esfuerzo: el presupuesto foral destinado a apoyar el comercio y el turismo se ha duplicado este año.
La Hacienda alavesa ha hecho un esfuerzo extraordinario durante este último año, ha recordado el diputado general. “Se han movilizado más de 300 millones de euros mediante medidas que pretendían dotar de mayor liquidez a pymes y autónomos para poder afrontar una crisis sin precedentes”.
Tras poner demanifiesto el buen funcionamiento del eje logístico Arasur-Jundiz-Foronda, ha valorado positivamente la aprobación de la Declaración de Impacto Ambiental del tramo Burgos-Vitoria del TAV, aunque ha vuelto a demandar la “misma celeridad” en abordar la entrada soterrada a Vitoria-Gasteiz. Ha recordado, asimismo, que el Ejecutivo foral está trabajando para definir el futuro de Aiaraldea de la mano con el Gobierno Vasco y la propia comarca. “Es el momento de definir los proyectos tractores que ayuden a la recuperación de una comarca que debe seguir siendo uno de los motores de Álava”, ha asegurado.
Cohesión territorial
Ramiro González se ha referido también al impulso de la cohesión territorial en la que se ha volcado el Gobierno Foral, con avances “notables” durante esta primera parte de la legislatura. Así, ha mencionado la agricultura alavesa, otro de los sectores que ha sufrido las consecuencias de la crisis sanitaria. Para paliar la caída de ventas, se han habilitado medidas de choque englobadas en el PlanÀ de recuperación económica de la Diputación Foral de álava. Ha resaltado que, durante los últimos años, 118 jóvenes se han incorporado al sector agrario con el apoyo de las ayudas forales.
En materia de infraestructuras viarias y el transporte, ha destacado as obras en la N-124 a la altura de Berantevilla, la N-240, la variante de Saratxo y la finalización de la travesía de Azazeta, entre otras actuaciones.
Asimismo, cumpliendo un compromiso del Gobierno Foral, se va a mejorar el modelo de subvención de peajes, extendiendo las bonificaciones a partir del próximo 1 de septiembre al tramo de Laudio a Bilbao en la AP-68, igualando en condiciones a los usuarios de la zona de Ayala con los del resto de Álava.
En materia cultural, las prioridades tras la aparición de la pandemia han tenido que ver con la programación local profesional, el mantenimiento de estructuras, la política museística y un nuevo paquete de subvenciones destinados al sector cultural y creativo. Ha citado la creación de Kultura Bizia, es decir, la adaptación del espacio Iradier Arena para el sector cultural; la planificación del proyecto de traslado del Museo de Ciencias Naturales, y el mayor impulso presupuestario para el Artium.
Transición energética
El tercer gran compromiso de la Diputación Foral va unido a la nueva economía basada en la transición energética. “Saldremos de esta crisis con un territorio más sostenible. Esto también lo hemos aprendido de la crisis. Álava ha de ser modelo y líder en esta materia”. Para ello, ha mostrado su compromiso a seguir trabajando con el Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz en el proyecto Mobility Lab, y ha puesto en valor que la Diputación Foral ha invertido más de 7 millones de euros en infraestructuras ligadas al agua.
En relación a las políticas de cambio climático, el diputado general ha asegurado que Álava “no va a perder el tren de las energías renovables”, y ha vuelto a expresar su “máximo apoyo a las renovables dentro de una política de defensa de la biodiversidad”. Así, se han comenzado los trabajos de la Estrategia Klima Araba 2050 y, a través de la sociedad foral Enargi Araba, se está impulsando Ekienea, la mayor planta fotovoltaica de Euskadi, ubicada en Armiñón. Además, ha hecho una mención especial al proyecto Ekiola, en colaboración con el EVE y la empresa Krean, que va a “democratizar el acceso a la energía”, mediante la creación de seis cooperativas de consumo, con el objetivo de generar de manera distribuida energía eléctrica de origen solar que permita caminar hacia el autoconsumo de la ciudadanía de los núcleos urbanos alaveses. En este contexto, ha asegurado Ramiro González, “cobra más sentido que nunca” la iniciativa de participación ciudadana Araba Helburu, un proceso sin precedentes y que tiene como objetivo ayudar a identificar los principales retos y metas a los que el territorio debe afrontar para llegar a la excelencia.
Durante estos últimos meses, y alineándose con la estrategia del Gobierno Vasco y su programan Euskadi Next, la Diputación Foral de Álava, ha asumido como propios los tres retos marcados por Europa: la transición digital, la transición energética ecológica y la cohesión social. Un trabajo que ha cristalizado en una veintena de proyectos.
“Estamos en el buen camino; la intensa labor del gobierno foral durante estos dosaños afrontando una crisis sin precedentes, dando respuesta inmediata a sus efectos y desarrollando las políticas que den respuesta a los grandes retos de nuestro territorio suponen la mejor garantía para el futuro de Álava”, ha concluido Ramiro González