Las labores de excavación en el entorno de la ermita de Santa Cruz de Gardea confirman la data del monumento
El pasado mes de julio el Ayuntamiento puso en marcha un proyecto de excavación arqueológica en el entorno de la ermita de Santa Cruz de Gardea para poner en valor y visibilizar el patrimonio histórico de Laudio. Pues bien, el equipo de arqueólogos y voluntarios ya ha concluido los trabajos y descubierto una moneda que ha servido para datar al monumento.
Durante la intervención en esta edificación religiosa, una de las más antiguas del municipio, el equipo de arqueólogos ha llevado a cabo sondeos, labores de excavación, registro gráfico y fotográfico, planimetrías e inventario de los materiales.
Los sondeos se realizaron en las terrazas anexas al edificio con el objeto de certificar que hubiera habido algún asentamiento enclavado en esa zona elevada respecto al valle y que se conoce como Gardeagotxi. Sin embargo, los cinco estudios llevados a cabo no descubrieron ningún material ni resto orgánico que pudiera indicar la existencia de una aldea en el citado entorno.
Las labores de excavación se llevaron a cabo en el interior de la ermita, concretamente en el presbiterio. Con estos trabajos el equipo de arqueólogos esperaba poder dar con elementos estructurales y materiales que pudieran tener relación con un documento del año 964, en el que se cita la existencia de un templo en Gardea dedicado a San Víctor y Santiago. Pero, finalmente, las labores no han podido confirmar la existencia de que aquella antigua iglesia estuviera en el emplazamiento donde hoy se encuentra la ermita de Santa Cruz.
Una moneda de 500 años
Las excavaciones realizadas en el presbiterio también se centraron en la zona que ocupó el altar, hoy desaparecido, en cuya zanja de cimentación apareció de manera casual una moneda. “Ha sido un hallazgo muy valioso. No por su valor material, sino por la importancia que nos da su cronología ya que, a falta aun de un estudio serio, fue acuñada bajo el reinado de Enrique IV, rey de Castilla. Es una moneda que está en circulación desde finales del siglo XV, y que muy probablemente se mantendría hasta los Reyes Católicos, ya que éstos no acuñaron moneda los primeros años de su reinado, debido a la abundancia monetal de sus precedentes. En este sentido, nos aporta una referencia cronológica de gran importancia”, ha avanzado el arqueólogo Juanjo Hidalgo.
Tras la investigación llevada a cabo, el equipo de arqueólogos ha concluido que entorno al año 1.500 en el entorno de Gardeagotxi se crea un templo nuevo dedicado a la Santa Cruz, es decir, no existe otro antes. “Tampoco hemos visto que haya habido casas o una aldea alrededor de ese templo. Sabíamos que la ermita se construyó en estructura de madera, al estilo de los primeros caseríos de la época, mediante pies derechos autoportantes desde la base hasta el tejado, unidos mediante tirantes y ensamblaje de cajas y pasadores de madera. Pero, además, oculta en el presbiterio, se encontraba una estructura de madera encajada en el suelo natural, de tres vigas mayores cruzadas por otras de menor sección que constituían la base de un entarimado, dando una mayor elevación a esta zona más sagrada respecto a la nave en que se acomodaba la feligresía. Se trata de la primera vez que se documenta este tipo de estructura. Tampoco cuenta con pila bautismal ni necrópolis. Se creó únicamente como una ermita”, concluye el experto.
“Gracias a esta labor evitaremos que se pierda el conocimiento sobre la forma de vida en nuestro municipio. Además de reforzar la importancia del lugar. Desde el Ayuntamiento seguiremos en la senda de recuperar y mantener al máximo el patrimonio municipal”, ha prometido el alcalde, Ander Añibarro.