Hoy el Museo de Orduña cumple 4 años y el edificio que lo alberga 140

Las tres partes que dan personalidad y seña de identidad al Museo de Orduña son los voluntarios que gestionan el museo, el contenido, tanto la colección permanente que definen al museo como etnográfico, como las exposiciones que lo identifican como museo de arte y coleccionismo. La tercera parte es el continente, el edificio donde se ubica el museo.

Este joven museo (2019), que hoy cumple su cuarto año de vida, está ubicado en un edificio que este año cumple 140 años. Su historia la tiene recopilada ADRAtan, Asociación cultural URDUÑAko Kultur Elkartea

La construcción

Tras constatarse en el Ayuntamiento de Orduña la necesidad de contar con una Escuela Pública, en 1881 se adquiere una huerta en la plaza de Santa María por 9.000 reales. La “primera piedra” del edificio se puso el 15-5-1882. El proyecto fue realizado por el arquitecto Félix de Aranguren Díaz de Lezana. Se inaugura en 1883, aunque las obras se terminaron en 1884. Orduña ya tiene su Escuela Pública.

El uso del edificio

En 1922, la Junta Local de Primera Enseñanza de la ciudad pide al Ayuntamiento que inste al Ministro de Instrucción Pública y Bellas Artes que se establezca en Orduña una “escuela nacional graduada de niños, con 4 secciones “.

Así, las Escuelas Públicas, que hemos conocido como Escuelas Nacionales, permanecieron en este edificio alrededor de 100 años, y contaban con tres aulas para chicos y un aula para chicas, todas ellas situadas en la primera planta.

En 1925 comienza a funcionar, de 6 a 9 de la tarde, la Escuela de Artes y Oficios. En esta escuela, de la que muchos desconocerán su existencia, se impartían clases de dibujo lineal, contabilidad, taquigrafía, mecanografía, corte y confección, aritmética, geometría, francés, física, topografía y mecánica. Parece que estas clases iban dirigidas a alumnos que ya había terminado la educación primaria.

Durante bastante tiempo, en el transcurso del pasado siglo, junto con la Escuela Pública, el edificio acogió en el piso superior los domicilios del sacristán de la parroquia y el de un empleado municipal. Mientras, en los bajos del edificio, se ubicaban los servicios municipales de limpieza, incluidos el carro y el mulo que lo arrastraba.

Los usos anteriormente descritos, dieron paso a otras utilidades: despachos municipales, local de la banda de música, academia de txistularis, biblioteca, aulas para el aprendizaje del euskera, ambulatorio médico, y la última, fruto de una importante rehabilitación, como Casa de Cultura.