La Diputación Foral de Álava suscribe el protocolo de atención a víctimas de violencia machista del Ayuntamiento de Amurrio

El Consejo de Gobierno Foral ha aprobado la suscripción por parte del Instituto Foral de Bienestar
Social (IFBS) del II Protocolo de atención intervención y acompañamiento a víctimas de violencia
machista del Ayuntamiento de Amurrio. Este protocolo, que suscriben asimismo la Ertzaintza y Osakidetza, actualiza los itinerarios establecidos en el I Protocolo de 2014 y propone mejoras para la
recogida de datos e información relativos a los casos.
El nuevo protocolo del Ayuntamiento de Amurrio define un procedimiento conjunto de coordinación, actuación y colaboración entre el sistema sanitario y los servicios sociales para propiciar una intervención integrada desde el ámbito social y sanitario. La adopción de este protocolo es un avance en la política de prevención de la violencia machista y la atención a sus víctimas, así como en la formación continua del personal que realiza atención.
En los últimos años, se han llevado a cabo avances tanto sociales como legislativos, con la reciente aprobación de diversas leyes, que inciden directamente tanto en la terminología como en las pautas de actuación y procedimientos de intervención. Por ese motivo, se ha visto la necesidad de revisar y actualizar el protocolo con el fin de mantener una mejora constante y poder proporcionar la mejor respuesta posible ante la violencia machista.
Una de las cuestiones que plantea esta actualización ha sido incluir la diversidad sexo-genérica en el procedimiento, ya que, hasta ahora, las personas del colectivo LGTBIQ+ que enfrentan violencia machista (doméstica, intragénero, LGTBIQ+fobia…) no habían sido contempladas.
El protocolo considera que las medidas que tengan por objeto prevenir, hacer frente, reparar y erradicar la violencia machista contra las mujeres deben estar enmarcadas en las políticas de igualdad.
Al mismo tiempo, contempla que los órganos competentes en materia de igualdad de mujeres y hombres
de las distintas administraciones públicas vascas, cada cual, en su respectivo ámbito de competencia, deben ejercer un papel de liderazgo y coordinación general.
Con este objetivo, el protocolo establece que se promoverán espacios de coordinación entre los órganos competentes en el ámbito de los servicios sociales y en el ámbito de la igualdad de mujeres y hombres, a fin de facilitar la definición conjunta de los modelos de atención, la inclusión de la perspectiva de género en la intervención y la generación de mecanismos estables de cooperación que favorezcan la mejora de la atención.